Resolución de Conflictos

Ninguna persona está exenta de enfrentarse a conflictos. Día a día se nos plantean situaciones y problemas que debemos resolver, ya que cada persona tiene una opinión y una forma de entender y ver el mundo. Esto crea conflictos en las relaciones sociales, y es de vital importancia saber cómo solucionarnos, ya que vivimos en sociedad.

Cualquier conflicto conlleva una serie de sentimientos negativos que, si no se aprende a manejarlos y expresarlos de manera adecuada, pueden ser perjudiciales para la salud psicológica de la persona. Las emociones que suelen darse son la rabia, la tristeza y el miedo. Aprender a manejarlas puede ser de mucha ayuda para establecer relaciones sociales más positivas.

Estilos de Afrontamiento del Conflicto

Cada persona resolverá sus conflictos de manera diferente, pero se pueden observar algún estilo predominante a la hora de resolver un problema con otra persona.

  • Evitación: Consiste en no enfrentarse al problema, ya sea porque se piensa que es mejor así o porque directamente no se quiere hacer frente al él y se acaba negando que exista el conflicto.
  • Acomodación: Se produce cuando aceptamos las condiciones de la otra parte para no estropear la relación. Se podría decir que es otra manera de evitar el conflicto.
  • Competición: Cada parte piensa que tiene razón, y ninguna dará su brazo a torcer. Esta estrategia probablemente acabará dañando seriamente la relación.
  • Solución del problema: Se da cuando se entiende que tanto el resultado del conflicto como la relación entre las personas es importante, y ambas partes luchan para encontrar una solución que sea buena para los dos.

Consejos para la Resolución de Conflictos

  1. Respetar: Cada uno tiene una opinión y una forma de entender las cosas. No existen los pensamientos o opiniones no válidas. Es más probable que la otra persona sea respetuosa con nosotros mismos, si nosotros mostramos respeto.
  2. Escuchar al otro: Puede que no estemos de acuerdo con la otra persona, pero debemos escuchar lo que tiene que decir. Quizá esto nos ayude a entenderle mejor.
  3. Empatía: Aunque no estemos de acuerdo con otra persona es importante intentar ponerse en su lugar, así podremos entenderle mejor.
  4. Usar un tono positivo: Para solucionar un problema es necesario dejar las críticas y los insultos a un lado. Atacando a la otra persona no se va a solucionar nada.
  5. No buscar culpables: Cuando intentamos solucionar un problema no sirve de nada buscar culpables. En vez de eso, es mucho más beneficioso centrarse en buscar una solución.
  6. Expresar los sentimientos: Es importante expresar los sentimientos y emociones que causan los conflictos. Ambas partes deben expresarlos, esto permitirá un mejor entendimiento, y que ambas partes intenten con más ganas buscar una solución
  7. Búsqueda de soluciones: Ninguna idea es mala cuando se trata de buscar soluciones y de arreglar una relación. Será muy positivo que cada parte afectada proponga sus ideas y que de manera conjunta se lleven a debate.